miércoles, 9 de marzo de 2011

Cómo buscar consuelo en cualquier verso

Envidio a aquel que tantas veces supo y sabe poner en palabras todo lo desconocido para mí, logrando que lo oscuro fuera bello, lo humano divino, y lo caótico sencillo. Un genio de tinta que todas las noches se sienta frente a su viejo escritorio de ébano para deshacerse sobre el papel, regalándonos así su más profundo orden y desorden. "Especialmente a mí" piensa él a veces, o "esta vez es para mí" piensa ella demasiadas veces. 


Seguimos rastros ajenos, con paso firme, confiando en que al final del camino encontraremos lo que buscamos, sin saber que, lo más probable, es que nos topemos con una bifurcación. Buscamos nuestro nombre tras cada punto y aparte, intentamos no creer que lo que nos espera no es más que ese temido punto y final. 


.

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. me lamenta pensar que nadie más disfruta de tales palabras como las que nos brindas. te haré publicidad ña ña

    ResponderEliminar